XXXI Domingo del Tiempo Ordinario (C)
EVANGELIO El Hijo del hombre ha venido a buscar y a salvar lo que estaba perdido (cf. Lc 19, 1-10)
EVANGELIO El Hijo del hombre ha venido a buscar y a salvar lo que estaba perdido (cf. Lc 19, 1-10)
EVANGELIO El publicano bajó a su casa justificado, y el fariseo, no (Lc 18, 9-14)
EVANGELIO (forma larga) No podéis servir a Dios y al dinero (cf. Lc 16, 1-13)
EVANGELIO (forma larga) Habrá más alegría en el Cielo por un solo pecador que se convierta (cf. Lc 15, 1-32)
EVANGELIO El que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío (cf. Lc 14, 25-33)
EVANGELIO El que se enaltece será humillado y el que se humilla será enaltecido (cf. Lc 14, 1. 7-14)
EVANGELIO Vendrán de oriente y occidente, y se sentarán a la mesa en el Reino de Dios (cf. Lc 13, 22-30)
EVANGELIO No he venido a traer paz, sino división (cf. Lc 12, 49-53)
EVANGELIO Lo mismo vosotros, estad preparados (cf. Lc 12, 32-48)
EVANGELIO Dichosos los pobres en el espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos (cf. Lc 12, 13-21)